El beneficio de salud mental
La relación entre felicidad y bondad es innegable: hacer cosas amables nos ayuda a sentirnos más felices. La ciencia ha demostrado que realizar actos de bondad aumenta la serotonina y la dopamina en el cerebro, lo que hace que sintamos una mayor sensación de satisfacción y bienestar. Estos beneficios también se pueden sentir al presenciar actos de bondad o al ser receptor de actos de bondad. Participar en actos de bondad también impulsa la conexión social, lo que se ha demostrado que beneficia positivamente el bienestar mental.
Con tales impactos positivos, incorporar actos de bondad en su rutina diaria o semanal puede ser una manera maravillosa de difundir alegría, forjar conexiones con quienes le rodean y aumentar su propia felicidad y bienestar mental.
Actos de bondad
Incluso el acto de bondad más pequeño puede impulsar un cambio positivo. Estas son algunas ideas simples para comenzar a incorporar estos actos de bondad en su vida:
- Envíe a un amigo o familiar una carta escrita a mano.
- Escriba mensajes positivos en notas adhesivas y déjelas en público para que otros las encuentren.
- Dele una buena reseña en línea a una empresa local que le agrade.
- Envíe un mensaje de texto o llame a un amigo y comparta un buen recuerdo que hayan vivido juntos.
- Deje algunas monedas de veinticinco centavos en una lavandería o en una máquina expendedora para que alguien las encuentre.
Si está buscando formas a más largo plazo de incorporar actos de bondad en su vida, considere buscar oportunidades para ser voluntario regularmente o involucrarse en su comunidad como una forma de servir a los demás. Es importante encontrar algo que disfrute hacer y que también le satisfaga. Podría considerar lo siguiente:
- Comedores públicos y bancos de alimentos: ser voluntario en un comedor público o banco de alimentos local es una manera maravillosa de servir a su comunidad y brindar consuelo a los demás.
- Tutoría o mentoría: ayudar a las generaciones más jóvenes como tutor o mentor puede tener un impacto duradero en ambas partes involucradas.
- Hacer compañía a adultos mayores: muchos asilos ofrecen oportunidades de voluntariado para evitar la soledad que muchos adultos mayores pueden sentir.
- Refugios de animales: ser voluntario en un refugio de animales puede brindar consuelo a los amigos de cuatro patas mientras esperan sus hogares definitivos.
- Proyectos comunitarios: muchas comunidades ofrecen oportunidades de voluntariado de temporada para participar en proyectos comunitarios como limpiezas, plantación o pintado y restauración.
Una cultura de bondad
Ser amable no es solo algo agradable: tiene el poder de transformar nuestras comunidades y nuestros lugares de trabajo. Crear una cultura de bondad significa tomar una decisión consciente para difundir calidez e impulsar conexiones. Ya sea un pequeño gesto como una sonrisa, o un acto de servicio más significativo, cada acción tiene un efecto dominó. Da forma a la manera en que interactuamos entre nosotros, y genera felicidad tanto a la persona que hace como a la persona que recibe el acto de bondad.
Los lugares de trabajo, especialmente, pueden beneficiarse de tener una cultura de bondad. Ya sea que su empresa opere de forma remota o presencial, la amabilidad puede beneficiar positivamente a todos los compañeros de equipo. Hay muchas formas de incorporar la amabilidad a su cultura laboral, pero una de las más fáciles y beneficiosas es a través del reconocimiento. El reconocimiento (un “¡buen trabajo!” después de una presentación, o un amable señalamiento en una reunión a un compañero de equipo que se desempeñó bien, cumplió una meta o completó un proyecto) puede ayudar a aumentar la autoestima y la realización, y según Gallup, puede ayudar a combatir el agotamiento de los empleados.
Para obtener más información, el centro de recursos para miembros de Uprise Health ofrece distintos blogs, folletos y webinarios sobre formas de fomentar la felicidad, controlar el estrés y practicar la atención plena y la gratitud, así como formas de vivir más saludable.